Kilos, muchos kilos de tapones fueron cargados ayer en un camión de unos 12 metros de largo que ahora descansa en el parking de una planta de reciclaje de la Ulzama. Mañana los pesarán y sabremos cuántas toneladas exactamente han podido recogerse en los cinco meses que la campaña lleva en marcha.
Catorce voluntarios fueron vaciando poco a poco la bajera de la avenida Eulza que el Ayuntamiento de Barañáin tiene cedida a la familia Chamba Celi para poder almacenar los tapones. En aproximadamente una hora y cuarto, el local pasó de estar repleto, sin que apenas pudiera abrirse la puerta, a estar casi vacía. Pese al gran tamaño y capacidad del camión, alrededor de 200 kilogramos no pudieron ser cargados.
Gracias a todos por la ayuda, el apoyo y los tapones y envases de estos meses. Aún queda mucho camino por delante para que Pablo llegue a valerse por sí mismo (los médicos cifran esta posibilidad en un 80%). No es fácil, pero las barreras se van saltando con el apoyo de todos los puntos de recogida y quienes se acercan a ellos a regalarnos sus tapones.
Pablo necesita alrededor de 60 toneladas anuales para poder financiar su rehabilitación y tratamiento en un centro médico de Pisa (Italia), puesto que la Seguridad Social de España no cubre algún tratamiento para su enfermedad (parálisis cerebral de nacimiento) ni hay un centro adaptado a sus necesidades. Desde que el pequeño, de tres años, comenzó con la terapia, su mejora ha sido muy notable; no solo ha mejorado en su salud, sino también su desarrollo físico y mental aumenta hasta acercarse notablemente a un niño de su edad, pese a sus impedimentos.
Además, gracias al apoyo y donación de muchas personas, Pablo contará en pocos meses con una máquina que le enseñará a respirar bien y que en un futuro le ayudará a estimular su habla. Pablo es consciente de lo que sucede a su alrededor, reconoce a las personas, es capaz de comunicarse a través de gestos y un teclado... sus capacidades intelectuales están intactas y, según los médicos, son muy avanzadas para su edad.
Ahora mismo, contamos con casi un centenar de puntos de recogida repartidos en toda la geografía navarra. Aun así, necesitamos más. Cualquier establecimiento puede sumarse, al igual que colegio, empresa, oficina, supermercado, peluquería, sociedad o club deportivo... Todos los rincones, abiertos o no al público, son necesarios para que Pablo pueda conseguir su objetivo, paso a paso.
Además, la familia dispone de una cuenta bancaria para aquellos que quieran aportar una ayuda económica, por muy pequeña que sea. El número es 2100 5293 11 2100343175 (La Caixa).
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| Los tapones que no han podido ser cargados al camión. Fotos: N. Bernhardt |
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